Add parallel Print Page Options

44 Y volviéndose a la mujer, dijo a Simón:

— Mira esta mujer. Cuando llegué a tu casa, no me ofreciste agua para los pies; en cambio, ella me los ha bañado con sus lágrimas y me los ha secado con sus cabellos. 45 Tampoco me diste el beso de bienvenida; en cambio ella, desde que llegué, no ha cesado de besarme los pies. 46 Tampoco vertiste aceite sobre mi cabeza; pero ella ha derramado perfume sobre mis pies.

Read full chapter